
Una nueva propuesta ha surgido en el panorama político colombiano, liderada por el exsecretario Luis Fernando Rosas, junto a otros líderes de organizaciones sociales. La iniciativa busca establecer un mecanismo de amnistía y perdón político para aquellos condenados por corrupción o involucrados en el conflicto armado, pero que no están sujetos a tribunales transicionales como la JEP o Justicia y Paz.
En una carta dirigida al presidente Gustavo Petro, Rosas, quien fue condenado por corrupción en el pasado, argumenta que si se están ofreciendo vías de reparación a actores del conflicto, debería extenderse la misma oportunidad a otros sectores no implicados en crímenes de lesa humanidad y que no comparecen ante la JEP. La propuesta sugiere que el perdón político podría ser una herramienta valiosa para avanzar hacia una política de paz total en el país.
El proyecto de ley planteado por Rosas conferiría al presidente la facultad de otorgar perdón judicial en casos donde este acto favorezca los objetivos de la política de paz. Este perdón tendría como consecuencia la anulación de condenas y sanciones judiciales, el archivo de investigaciones en curso y la restauración de derechos políticos.
“El efecto del perdón así concedido será la anulación de las condenas y sanciones judiciales y el archivo de las investigaciones en curso, así como el restablecimiento de los derechos políticos”, afirma el artículo segundo de la propuesta.
Racionamiento de agua en Bogotá podría ser más fuerte, advirtió el Acueducto: “Si no está cediendo el consumo, habrá medidas más estrictas”
Te puede interesar: Racionamiento de agua en Bogotá podría ser más fuerte, advirtió el Acueducto: “Si no está cediendo el consumo, habrá medidas más estrictas”
Además, se prevé que el presidente cuente con un equipo jurídico especializado para revisar casos afectados por errores jurisdiccionales o por una justicia que haya sido instrumentalizada políticamente. Aquellos beneficiados por el perdón deberán resarcir los daños causados a la administración pública y al erario para que se levanten sus inhabilidades políticas.
La propuesta también establece que si los individuos beneficiados por el perdón reinciden en actos de corrupción, los beneficios otorgados serán revocados. Esta iniciativa, según Rosas, busca no solo ofrecer una segunda oportunidad a quienes han cometido errores, sino también fortalecer el proceso de reconciliación y paz en Colombia.
Cómo se catalogan los delitos en la actualidad
En Colombia, los delitos de corrupción se catalogan y juzgan de acuerdo con el Código Penal y otras normativas específicas que abordan la conducta corrupta en el ámbito público y privado. Según la Fiscalía, algunas de las principales tipologías de corrupción son:
Peculado: Se refiere al uso indebido o la apropiación de fondos públicos por parte de un funcionario. Las penas varían según la gravedad del delito, pero pueden incluir prisión de 4 a 15 años y multas.
Cohecho: Este delito ocurre cuando un funcionario público solicita o recibe beneficios indebidos a cambio de realizar u omitir un acto relacionado con sus funciones. Las penas pueden ser de 3 a 15 años de prisión y multas.
Prevaricato: Se da cuando un funcionario emite una decisión injusta en un proceso administrativo o judicial. La pena puede ser de prisión de 3 a 15 años.
Enriquecimiento ilícito: Ocurre cuando un funcionario público incrementa su patrimonio de manera desproporcionada a sus ingresos legales. La pena puede ser de prisión de 6 a 10 años y multa.
Concusión: Este delito se configura cuando un funcionario exige, directa o indirectamente, el pago de sumas de dinero o beneficios indebidos. La pena puede ser de prisión de 5 a 12 años y multa.
Tráfico de influencias: Se presenta cuando una persona utiliza su influencia sobre un funcionario público para obtener un beneficio indebido. La pena puede ser de prisión de 4 a 8 años y multa.
Estos son solo algunos ejemplos de los delitos de corrupción tipificados en la legislación colombiana. Las penas específicas pueden variar dependiendo de las circunstancias del caso y la gravedad del delito cometido. Además, el sistema judicial colombiano contempla medidas adicionales como la confiscación de bienes y la reparación del daño causado al Estado.
El proceso de juzgamiento de estos delitos se lleva a cabo en el sistema judicial colombiano, donde los fiscales presentan los casos ante los jueces competentes. Los acusados tienen derecho a un juicio justo y a la defensa, de ser encontrados culpables pueden tener inhabilitación para ejercer cargos públicos. Con Infobae